Carta a Tin Grew
Estás en un asiento de pasillo de un avión presurizado
volando en algún lugar sobre la interminable turbulencia
del Océano Pacífico cerca de esas terribles cortinas
de humo negro que, según los sitios de noticias de la ventana
de mi navegador, arrasan tres estados de Australia.
Hace ocho horas ya que te dejé en la terminal internacional
y te perdí de vista entre taxis y minivans
y el oleaje de viajeros rodando maletas
hacia sus registros y te uniste a la corriente triste
de autos cuyos conductores han intercambiado adioses con aquellos
que aman. Los meteorólogos dicen que los incendios
atraen el aire del árido corazón del desierto del país.
¿Me equivoco al pensar que el amor funciona igual
en nuestros cuerpos? Es invierno adonde vas.
Suscríbete para recibir actualizaciones
Comentarios
Más de Michael Steven
Los más leídos
- Lluvia sobre el tejado de Janet Frame 1k visitas
- A mi hermano gemelo de Ian Wedde 899 visitas
- Pensamientos en torno a un proverbio sufí de Hone Tuwhare 780 visitas
- La muerte de Sócrates de Michael Jackson 692 visitas
- Desempleo de Janet Frame 609 visitas
- Estas flores blancas de C. K. Stead 500 visitas
- Hierro salvaje de Allen Curnow 471 visitas
- Incidente de Fleur Adcock 415 visitas
- ¿Por qué no hablas conmigo? de Alistair Campbell 408 visitas
- Instrucciones para leer un poema de Glenn Colquhoun 374 visitas
- Vida interior de Jenny Bornholdt 332 visitas
- Amigo de Hone Tuwhare 316 visitas